Me gustan los
pasteles aunque no es mi platillo favorito, prefiero lo salado, pero este
pastel, además de que tiene su historia, quedó que ni yo misma lo podía creer
¡delicioso! Cerré los ojos con cada bocado y lo disfruté como hacía mucho
tiempo no me deleitaba con algo dulce.
La historia es
que a mi esposo Pedro le encanta el chocolate oscuro y cuando vivíamos en la
ciudad de México, gracias al buen consejo de nuestro compadre Carlos, di con
una pastelería que está en Polanco y se llama “La Marquesa”. Para un cumpleaños
de Pedro le compré ahí un pastel de chocolate oscuro que hasta la fecha
recuerda con mucho gusto. Pues bien, igual que con otras recetas me hice el
propósito de reproducirlo para consentirlo en alguna otra ocasión.
Pasaron más de
10 años para dar con la receta más cercana al pastel de “La Marquesa” y que,
desde mi humilde opinión de cocinera mamá cuerva, lo supera con creces.
Busqué
y busqué y esta receta fue la que más me latió —no me equivoqué— y debo ser justa con el autor: no sé su nombre
pero tiene un canal en YouTube que se llama Bake Like A Pro. Y sí, puedo
afirmar que lo logré. Salvo por un detallito, lo preparé a pie juntillas, ya les
diré qué fue, pero para que salga así de delicioso (sin abuela) hay que
respetar ingredientes, tiempos y cantidades.
Pastel de chocolate muy oscuro y delicioso. Fotografía: Laura Castro Golarte. |
Ingredientes
2 tazas de
harina
¾ de taza de
agua caliente
250 gramos de
chocolate amargo en tablilla (60 % cacao)
½ taza de leche
½ taza de cocoa
oscura
4 huevos
2 ¾ tazas de
azúcar
2 cucharadas de
café soluble o instantáneo
2 cucharadas de
aceite vegetal
½ cucharadita de
bicarbonato
2 cucharaditas
de polvo para hornear
1 cucharadita de
sal
250 gramos de
mantequilla sin sal
Preparación
En una olla
cerrada, en la que se pueda sostener un tazón grande, se pone a hervir agua
corriente. En cuanto suelte el hervor se le pone encima el tazón, de preferencia
de vidrio, y ahí el chocolate, el azúcar y la mantequilla. Mientras empiezan a
derretirse, en los ¾ de taza de agua caliente se disuelve el café instantáneo y
se agrega al chocolate; y se ciernen la harina, la cocoa, los otros polvos y la
sal.
Cuando todo esté
completamente derretido, se mezcla y se retira de la olla, con mucho cuidado de
no quemarse con el vapor.
El tazón se
coloca sobre la mesa de trabajo o en una tabla y se agrega la leche. En este
punto se enciende el horno a 150º C (300º F). Se empieza a batir con batidora
de mano y se van incorporando los huevos de uno por uno y el aceite. Se detiene
la batidora y se agregan los ingredientes secos, se mezclan un poco con la ayuda
de una pala o cuchara para que a la hora de usar la batidora no se haga una
polvareda.
El molde se engrasa
con mantequilla y se enharina. Se vierte la mezcla y se hornea por dos horas
¡dos horas! ni un minuto más ni un minuto menos.
Mientras, se
prepara la cobertura que sabe a gloria, como a trufas del paraíso.
Fudge de
chocolate muy oscuro
Ingredientes
200 gramos de
chocolate oscuro en tablilla (70% cacao)
120 gramos de
mantequilla sin sal
½ taza de crema
para batir
Preparación
Igual que como
con el pastel, los tres ingredientes se ponen en un tazón para que se derritan
a baño María. En cuanto esté todo derretido e integrado, se retira del vapor,
se deja enfriar y se mete por media hora al refrigerador, hasta que quede de
una consistencia untable. Si se pasa de frío y se solidifica, se puede derretir
en el microondas.
Montaje
El pastel se deja enfriar completamente y se desmolda sobre una rejilla. Luego se coloca sobre una charola cubierta con papel encerado y se empieza a bañar con el fudge. Esto hará que la cobertura sea completa y limpia. Lo que cae en el papel encerado se mete al congelador y el resultado es una rica tableta de chocolate.
Delicioso. Fotografía: Laura Castro Golarte. |
Notas: Aquí está
el detalle que no cumplí: para el fudge debí utilizar mantequilla con sal pero
no tenía, así que pensé en agregar una pizca de sal. A la hora de la hora se me
olvidó y el resultado fue extraordinario de todos modos.
Insisto en la necesidad de respetar cantidades y tiempos por lo siguiente: cuando lo estaba preparando pensé que era mucha azúcar y que iba a quedar empalagoso, y no, quedó perfecto. Y con respecto al tiempo, creí que dos horas era demasiado, pues tampoco, de hecho, es parte del secreto para que quede con esa consistencia celestial.
De todos los ingredientes tenía dudas con respecto al café soluble porque no me gusta el café dulce. Consideré que el pastel podría saber a café más que a chocolate. Gran sorpresa. No sé cuál es el efecto pero contribuye a que el resultado sea extraordinario.
Bueno, otro detallito es que usé molde de rosca y no hubo problema. Es más complicado de enmantequillar y enharinar pero nada más.
Si lo preparan me cuentan, vale la pena todo.
¡Hasta la próxima y buen provecho!
De solo leer la receta, se me derritió la boca como chocolate a "baño maría"
ResponderEliminarPrepáralo y me cuentas 😊
ResponderEliminar¡Híjole, puros antojos!
ResponderEliminarLaura: mil gracias por la receta, fue un gran éxito en mi casa. Laborioso, pero el resultado es sublime. Gracias porque las fotos ayudan mucho.
ResponderEliminarSoy tu fan,
Ale
Se me antoja mucho con un chocolate amargo muy fino. Habría que ver dónde conseguirlo. En cuanto a lo que mencionas de los ingredientes exactos, yo siempre he sabido que en cuestión de pasteles hay que seguir las recetas al pie de la letra. ¡Se ve rico y lo agrego a mi lista de proyectos!
ResponderEliminarSólo de leerte se me hizo agua la boca. Preparar pasteles no es lo mio, pero algún día me animaré. Felicidades por el blog. Imagino que inviertes mucho tiempo para publicar cada receta, pero vale la pena. Felicidades.
ResponderEliminarHola Mónica, sí le invierto tiempo pero no diario, más o menos he logrado administrarlo bien, muchas gracias por tus comentarios y gracias también Ale por compartir que lo preparaste y el resultado ¿verdad que no hay pierde?
ResponderEliminar